Hoy en día vivimos inmersos en un mar de necesidades y obligaciones. Es una carrera contra el tiempo donde constantemente nos vemos angustiados y desesperados, así como presionados por el cumplimiento de nuestras tareas. La empresas exigen cada vez mas rendimiento y por esto tenemos menos tiempo para la familia, los hijos...... y nosotros mismos.
El masaje es una terapia perfecta, con la que nos consentimos, nos distanciamos del mundo exterior y damos espacio a nuestro yo interior. Nos dedicamos un espacio de tiempo que es necesario para reponer fuerzas, calmar la mente y armonizar el alma. El masaje realizado con amor y sentimientos de paz y serenidad por el terapeuta, permite que esta energía impregne a quien se realiza la terapia, ayudándolo a lograr esta paz interior en menor tiempo y favoreciendo los procesos de reparación del cuerpo. Es así como el masaje actúa energéticamente aportando emociones positivas y estados de sentimiento activos que promueven el bienestar y la sensación de placer.
En cada masaje, el terapeuta deja un poco de si mismo al paciente y el paciente deja ir sus angustias y problemas en una interrelación que por naturaleza está hecha para sanar. Por eso el masaje es EL TOQUE SANADOR, siempre y cuando las emociones del terapeuta sean las correctas.
Los aceites que se emplean durante la terapia también aportan para que el paciente pueda reponerse en caso de enfermedad, de soltarse en caso de algún factor emocional o, involucrando la parte mental, permitirse un momento de sosiego, ofreciendo al cerebro un espacio de descanso de las múltiples actividades que diariamente realiza. Todo esto permite el verdadero descanso, el verdadero espacio de calma y serenidad, en donde por un momento tocamos la felicidad y un verdadero estado de conexión con nosotros mismos.
Quienes se benefician del masaje? Todos. los niños, los ancianos, los enfermos, los adultos, los adolescentes. En la India saben muy bien los beneficios del masaje y la forma como el tocar y ser tocados permite la liberación de sentimientos tóxicos y tensiones y promueve sentimientos positivos hacia uno mismo y hacia los demás, por ello, desde temprana edad, enseñan a los niños a dar masaje a sus abuelos, y, así mismo, entre esposos se ofrecen con frecuencia, sesiones de masaje. Además del beneficio psicológico, el masaje aumenta el sistema de respuesta del cuerpo ante las enfermedades, fortaleciéndolo, aumenta la elasticidad de la piel rejuveneciéndola, y contribuye enormemente a que el sistema linfático elimine sustancias de desecho. Un método ancestral y sencillo, que con miles de años ha comprobado su eficacia, y por eso aún hoy se usa ampliamente en el tratamiento de cientos de dolencias. UNA TERAPIA SENCILLA AL ALCANCE DE TODOS.
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